Inicio teorías Biología Matemáticas SLIDES Mis poesías

"Leer te condena a muchas cosas terribles, sobre todo a la lucidez; te acerca más a las cosas en su esencia, que a menudo es desagradable, pero también te da los mecanismos analgésicos y compensatorios para enfrentarte a ellas"

Arturo Pérez reverte





viernes, 17 de octubre de 2008

Ordenadores y Test de Turing

Pueden los ordenadores pensar? Todavía no, que se sepa. Ninguna computadora ha superado hasta el momento el test de Turing, llamado así en honor del matemático británico que ayudó a descifrar los códigos criptográficos nazis durante al Segunda Guerra Mundial y a quien se considera el padre de la informática. Alan Turing propuso en 1951, en su artículo 'Computing machinery and intelligence' (Maquinaria de cálculo e inteligencia), el denominado 'Juego de imitación' como una vía para detectar la consciencia artificial.
El test de Turing es aparentemente muy simple: sólo hacen faltan cinco minutos, dos personas y un ordenador. Uno de los seres humanos y la computadora entablan una conversación durante cinco minutos sobre un tema cualquiera a través de una pantalla de ordenador. No se ven: están en habitaciones distintas separados por mamparas, aislados físicamente como los millones de personas que cada día chatean por Internet. Tanto el ordenador como el humano intentan defender su condición de seres inteligentes, aunque sea mintiendo. La segunda persona participante es el juez: no sabe cuál de los interlocutores es su congénere y cuál la máquina. Tendrá que decidirlo a partir de la conversación que lea en su pantalla.


Alice, Brother Jerome, Elbot, Eugene Gootsman, Jabberwacky y Ultra Hal son los seis ordenadores que el domingo intentarán superar la prueba en la universidad británica de Reading. Si lo hacen, algunos creen que estaremos más cerca de convivir con máquinas con sentimientos, como el paranoico Hal 9000 -el ordenador asesino de '2001, una odisea del espacio'-, Roy Batty -el replicante angustiado por la muerte de 'Blade runner'- y David -el niño androide que añora a su madre adoptiva humana en 'Inteligencia artificial'.
La prueba se empezó a realizar en 1991, cuando el inventor estadounidense Hugh Loebner creó el galardón que lleva su nombre, que premia con 100.000 dólares y una medalla de oro de 18 kilates a los programadores de la primera máquina inteligente. El concurso fue suspendido entre 1991 y 1995 por fallos en el diseño experimental, y desde entonces ningún ordenador ha conseguido engañar al juez, hacer que dude sobre su origen mecánico.
Aunque una computadora supere el test de Turing, eso no tendría por qué significar que fuera inteligente. Kevin Warwick, informático de la Universidad de Reading, reconocía en la prensa británica que habría filósofos que entonces dirían: «Vale. Ha superado la prueba, pero no sabe lo que está haciendo». A fin de cuentas, Deep Blue, la supercomputadora de IBM, derrotó a Gary Kasparov al ajedrez en 1997 y no por eso se la considera inteligente.

Y nos adentramos en "2001 una odisea del espacio" donde HAL , el superordenador, se transforma no sólo en algo capaz de pensar, sino que se libera del control humano.
Y, lo que parecía ciencia ficción, resulta que no lo es tanto, porque, no es extraño que inventen un test para casi todo.
Lo extraño, es que exista la posibilidad de que algún ordenador lo supere.
Y, digo yo, que si se les hacen pruebas, será que piensan que puede suceder.